viernes, 4 de noviembre de 2011

¿Quien dijo que no se podía?

Esta vez me adelanto a la crónica de esta semana para subir otro video; resume lo que puede suceder un domingo cualquiera tempranito ante una bajada impresionante.

David saca una de sus gominolas, y nos invita a todos a un trocito, el único que se atreve es Jonatan, que toma con su mano la glucosa y sin miedo le pega un bocado. Ante la inclinación de la pendiente, surge la duda, el miedo a caerse, pero en este tipo de situaciones siempre surge la palabra mágica; nadie se atreve a decirla, todos nos miramos, y David se atreve a decirla: ¿a que no hay güevos?
En ese momento a Jonatan  la glucosa de la gominola le dispara la adrenalina, Javi prepara la cámara que lleva en su casco, y David asustado se arranca para apartar a la gente del camino.

En ese momento Jonatan y Javi salen disparados cuesta abajo, y lo que sucede despues lo puedes ver en el video.
Raul, Elias, Oscar, Jose, Tomás y un servidor bajamos mas despacio recogiendo los trozos de la "la pierre" de Jonatan, que casi se desmonta por completo en los baches. 

En la parte de abajo nos esperan un cajón de botellines fresquitos.

Al llegar al final, Javi le grita a Jonatan "good job", buen trabajo en inglés, y es que los domingos a veces hablamos en otro idioma.

Pedazo de bajada...8 minutos de infarto....


No hay comentarios:

Publicar un comentario